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Emprendedoras en el Metaverso: MINERVART

 

Idoia e Izaskun Azaldegui, participantes de Proyecto Promociona, nos cuentan cómo ha sido la creación y puesta en marcha de Minervart, una galería dedicada al arte, la cultura y la empresa promueven el empoderamiento de la mujer en esta plataforma, tanto en el arte (con NFT’s) y la empresa en el ámbito STEM.

La iniciativa de invertir en el Metaverso surgió por parte de Izaskun ya que, en el contexto de su trabajo en una entidad financiera, vio la posibilidad de comprar una “Terra” en el Metaverso.

El objetivo de esta inversión necesariamente tenía que ir unido a que este espacio ofreciera contenidos, que ofrecieran un servicio de información y entretenimiento al conjunto de espacios de la plataforma del Metaverso y a los avatars que acudieran.

Inicialmente pensamos en crear una galería de arte y exponer NFT ya que Idoia tiene como afición la pintura digital y ya contaba con una colección de NFTs​´​.

Posteriormente, en el proceso de desarrollo de negocio, pensamos que era importante promover el ODS 5, de Igualdad de género, también en el Metaverso, facilitando que mujeres de sectores multidisciplinares pudieran dar a conocer su conocimiento también en este universo. Idoia, como gerente de un centro de investigación, ha impulsado el liderazgo de las mujeres científicas dentro de su ámbito profesional.

Todavía los datos de diferentes estudios avalan la necesidad de continuar en esta labor para dar mayor visibilidad y reconocimiento al liderazgo femenino.

Según el Informe de Emprendimiento de EY 2021, aunque el ecosistema emprendedor se fortalece día a día, todavía tiene como asignatura pendiente incrementar la presencia del talento femenino. El desajuste en el ecosistema por la mayor presencia de hombres frente a mujeres (80% vs 20%) es una realidad transversal a todos los sectores industriales.

En el ámbito artístico, aunque el 70 % de las estudiantes de Bellas Artes sean mujeres, suelen tener un menor acceso a los recursos de creación y producción y están infrarrepresentadas en los puestos de dirección. Su presencia es mucho menor en las galerías de arte y ferias. Por otro lado, hoy es un hecho que los perfiles profesionales más demandados están relacionados con la tecnología: Inteligencia Artificial, Ciberseguridad o Big Data, entre otros. En este sentido, el Observatorio Nacional de las Telecomunicaciones, apunta a que solo el 23% de los trabajadores del sector de las Tecnologías de la Información y la comunicación son mujeres.

Y también ​En el informe ‘Científicas en Cifras 2021’ se destaca la necesidad de fomentar las vocaciones científicas y técnicas entre las jóvenes. Así lo demuestra el hecho de que, aunque las mujeres son el 56% de las universitarias, en áreas como la ingeniería o la tecnología sólo representan el 25,4%.

 

Por eso decidimos emprender en el Metaverso con una galería, una terra, dedicada al arte, la cultura y la empresa​ promoviendo el empoderamiento de la mujer en esta plataforma, desarrollando actividades lideradas por mujeres principalmente, tanto en el arte (con NFTs), la empresa como en el ámbito STEM.

 

« Las conferencias, y exposiciones fomentarán la visibilidad de las mujeres en el Metaverso »

 

También, queremos despertar vocaciones empresariales y técnicas de las adolescentes a través de las actividades que desarrollemos en el que participarán mujeres referentes en distintos ámbitos multidisciplinares.

Mantuvimos algunas reuniones con los creadores de la plataforma tecnológica Uttopion y comenzamos con el desarrollo de negocio.

Comenzamos con la elección del nombre y logo inspirado en Minerva, Diosa romana de la sabiduría y de las artes, que consideramos representaba bien el liderazgo femenino.

 

« MINERVART, unía conocimiento en su sentido amplio, de letras y ciencias, arte y mujer »

 

Elaboramos un plan estratégico inicial para estos dos primeros años, y un plan de actividades sobre las áreas de conocimiento a reforzar y las acciones correspondientes. Hemos establecido una programación de eventos y hemos contactado con mujeres referentes en distintas disciplinas para que nos puedan presentar sus libros, arte, conocimientos científicos…

 

Actualmente, estamos en la fase de terminar de construir y habilitar nuestra galería con el apoyo de desarrollo tecnológico de Uttopion y en paralelo cerrando las exposiciones previstas de NFTs, conferencias de tipo empresarial o científico, presentaciones de libros, exposiciones de joyas, moda….

Estando en esta fase, trabajando en el proceso de lanzamiento, supimos de la convocatoria Inspiring Women Leaders 2022, UU Prize 2022 y optamos por presentar nuestro proyecto de emprendimiento en la categoría ODS 5. Para nosotras ha sido un honor recibir el premio y agradecemos a Teresa Alarcos su apoyo y su gran trabajo en aras a promover el liderazgo y el emprendimiento femenino.

Nos gustaría avanzar con mayor celeridad y que la galería esté en pleno funcionamiento para el 2023, pero al tratarse de un entorno tan innovador, el proceso no es tan inmediato, aunque estamos con una gran ilusión​ y contamos con el equipo tecnológico de Uttopion que nos está apoyando​.

 

Las dos somos “Promociona ” , Idoia Promociona 7.3 e Izaskun Promociona 9.2, y estamos muy orgullosas de formar parte de esta “Familia” #SoyPromociona. En este proceso de desarrollo de negocio de MINERVART, en su diseño, planificación, nos ha ayudado mucho nuestro paso por el programa.

Las dos sentimos que con nuestro proyecto también queremos dejar un legado en el Metaverso​ para que las futuras generaciones tengan bien presente que las adolescentes pueden ser profesionales en cualquier campo de la ciencia, empresa o del arte…que no se pongan límites, que crean en ellas misma​s, que puedan conocer directamente a mujeres referentes que les puedan inspirar para construir su futuro profesional.

 

Lucha sin tregua

 

Permitidme un desahogo: a veces, muchas veces, me aburren los temas de la mujer. Pienso en tantas de las nuestras, oprimidas por culturas terribles y en ocasiones gracias a otras mujeres alienadas por esas mismas culturas. No las tenemos tan lejos. Han llegado a nuestras calles europeas, a nuestros barrios. La prensa, por aquello de lo políticamente correcto, oculta los orígenes de las martirizadas por la violencia de género o por la prostitución inducida por el vudú, ¡el vudú! Los cambios en sus países son tan lentos como desanimados por la indiferencia egoísta de unos y de otros. Y yo, con eso en mente, tengo que reflexionar sobre la suerte de un grupo de europeas, de españolas que encuentran escollos para ascender en sus carreras profesionales. Sí, a veces me aburren los temas de la mujer.

¿A qué me aferro para seguir? Egoístamente, a que tengo dos hijas brillantes -y no es pasión de madre- y les desearía mejor suerte que las de las generaciones precedentes, aunque no las tenga todas conmigo. También me aferro a una pequeña historia que he recordado otras veces, pero siempre me parece relevante, y tiene por protagonista a Menchu Ajamil, consultora de la ONU y presidenta de la asociación en la que entonces yo militaba. En la famosa cumbre de Pekín, donde tantos planes se hicieron para el desarrollo planetario de las mujeres, se rebelaba ella durante un taller de trabajo sobre las limitaciones profesionales de las occidentales. Se paró un momento, ante la mirada de una africana, pero esta no la observaba con reproche y, al contrario, le pidió que siguiera en una lucha que antes o después ayudaba a mejorar la suerte de las nacidas en otros horizontes.

Somos unas privilegiadas, sí, pero también reconozco que tenemos nuestros avances en continuo peligro y así seguiremos muchos años, hasta que la idea de la igualdad haya impregnado a toda la sociedad y la lucha por el ascenso, si vamos a lo profesional, se establezca en términos de capacidad y, por qué no decirlo, de astucia (me irritan las mujeres que parecen esperar sentaditas a que las saquen a bailar). Por el momento, cada vez que haya una crisis económica, como la que ahora ha traído la pandemia, seguiremos siendo las primeras en caer, sobre todo si elegimos concentramos en los sectores más feminizados o en las áreas de la empresa más prescindibles temporalmente. Y además seguiremos teniendo todas las de perder si no logramos un adecuado reparto de tareas y unos recursos al alcance de la mayoría que garantice el cuidado de niños y dependientes. Para escarnio nuestro, la presencia de mujeres en el Gobierno y en otras escalas de la administración no parece cambiar nada con verdadero realismo, o, incluso últimamente nos sorprenden con ideas estupefacientes. Y no entro ahora en más detalles. Pero ¿qué pasa con nuestro voto? ¿Por qué no hacerlo valer? ¿Dónde está la capacidad de presión de casi el cincuenta por ciento de la población trabajadora presente en toda la escala laboral?

¿Me estoy dirigiendo hoy a mujeres que aspiran al liderazgo o que ya tienen madera de líderes? Porque mal asunto si tengo que recordar que el liderazgo implica capacidad de riesgo, compromiso y arrastre, capacidad de convicción para que un equipo, un grupo, una sus fuerzas en favor de un objetivo. En la empresa y en la vida. Podemos luchar cada cual en solitario: buena suerte y a no llorar si se pierde. O, conociendo las dificultades que tenemos y nos esperan, podemos cruzar ideas entre nosotras, estrechar lazos aprovechando las asociaciones profesionales, los grupos de exalumnos/as universitarios o de escuelas de negocios, también crear otras plataformas de presión y reivindicación con la ayuda de las redes, que expandan nuestro poder, en el que a veces no creemos. Hay que pensar. Y actuar. En un momento de increíbles cambios, unas podrán bucear en estudios, documentos y libros para ofrecer ideas; otras podrán otear oportunidades en un horizonte vertiginoso; otras descubrir cómo mejorar la abundante legislación que a veces nos protege casi hasta la asfixia, pero que ni se controla ni se afina. Y ponerlo en común.

El momento, tengo que repetirlo, es decisivo porque las reglas de la economía y la empresa están cambiando de forma acelerada y con ella nuestras maneras y posibilidades de trabajar y, por supuesto, la estructura de la carrera profesional, los puestos de gestión y decisión: pensemos en cómo influirá el teletrabajo en todo eso y en nosotras y surfeemos la ola con seguridad, ya que muchas de las cualidades que los nuevos sistemas demandarán las poseemos, de manera innata o a la fuerza: flexibilidad jerárquica, rapidez de adaptación, pulso mediador, habilidad comunicativa…

Tenemos mucho que hacer. Y qué le vamos a hacer, como dirían los italianos: la guerra e bella ma incomoda.